En horas de la tarde del domingo, voluntarios de Zárate Recicla llevaron a cabo la segunda edición de este desafío que da vueltas por todo el mundo.
Primeramente, esta propuesta comandada por las hermanas Valeria y Cecilia Insúa junto a su mamá Lía Perna, contó con una importante presencia de vecinos que, convocados a través de las redes sociales, se sumaron a la idea (elegir un espacio público que se encuentre contaminado por la presencia de basura, fotografiarlo y poner manos a la obra para revertir ese estado), compartiendo luego la imagen y cotejar los cambios logrados.
En esta oportunidad, el grupo de voluntarios volvió a reunirse en la estación de servicio ubicada en Arribeños y San Lorenzo para continuar su labor en lo que se conoce como “camino de tránsito pesado”, cruzando debajo del Puente Mitre del Complejo Zárate-Brazo Largo, extendiéndose hasta detrás de Zárate Chico.
Según las organizadoras, este encuentro fue menos extenso, pero muy productivo. Como aspecto negativo, remarcaron que no se retiraron las bolsas de basura juntadas la semana anterior, siendo las mismas incineradas y desparramadas.
