Creen que podría ser una obra salida del taller del artista, pero no sólo de su mano. Así su precio caería notablemente.
La pintura no será parte de la gran exposición de este año sobre Leonardo da Vinci en París porque los curadores del Louvre no creen que pueda ser atribuida solamente al artista.
El historiador del arte y escritor Ben Lewis ha trazado la notable historia de una pintura que dio lugar a grandes titulares en todo el mundo cuando se vendió por 450 millones de dólares en 2017.
Lewis es autor del libro “The Last Leonardo”, que rastrea la historia insólita y enmarañada de la pintura.
Esta había sido comprada por dos marchands estadounidenses, que hicieron una apuesta, en 2005 en una venta de bienes en Nueva Orleans por 1175 dólares.
Fuente: Clarín