Afectado por una crisis que se potenció con la devaluación de las últimas semanas, el sector tambero salió a pedir al Gobierno respaldo para no ir a la quiebra: específicamente, solicitaron créditos a tasas bonificados.
Hace unas semanas, las entidades del campo (Carbap, Sociedad Rural, y varias cuencas lecheras) firmaron un comunicado conjunto en el que denunciaron que frente a la crisis del sector “la Nación sólo presenta datos” y la Provincia ofrece “créditos imposibles de pagar”
Ahora, el presidente de Coninagro, Carlos Iannizzotto, pidió que el Gobierno “acompañe” al sector lácteo con una línea de financiamiento a tasas bonificadas hasta que pueda “recomponer” sus márgenes de rentabilidad ante una “difícil coyuntura”.
“La devaluación no hizo más que agravar los problemas de competitividad que padecen los tambos, enfocados mayormente en el mercado local, ya que alrededor del 85% de lo producido en el país se destina a la plaza interna”, argumentó el dirigente agropecuario.
Come en dólares
“La vaca come en dólares y vende leche en pesos: nuestros insumos aumentaron el 40% y la leche sólo el 10% en lo que va del año. Ecuación mortal para los tambos, sector que viene herido desde hace muchos años”, habían dicho por su parte Carbap y SRA.
“Los productores lecheros manifestamos descontento, desconcierto y preocupación luego de haber participado el pasado miércoles 6 de junio pasado de la Mesa Provincial de Lechería. Ninguno de los otros eslabones mostró intenciones inmediatas de recomponer la situación de la producción láctea”, indicaron.
“No llegan a fin de año”
En tanto, el vicepresidente de la Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Jorge Chemes, volvió a alertar sobre la “profunda y larga” crisis del sector lechero y advirtió que “hay tambos que no llegan a fin de año con esta situación”.
“El sector está viviendo una profunda y larga crisis. Históricamente no se ha vivido una crisis de tantos años”, detalló el referente ruralista entrevistado por radio Continental. Chemes señaló que “se sigue incrementando brecha de precios entre el productor y el consumidor”.
Así lo afirma un informe de la institución, que destaca que el productor está “empujado hacia planteos productivos defensivos y de cuasi subsistencia”. Así “la productividad se encuentra en jaque y los planteos productivos se retrotraen a los de 40 años atrás no para aumentar la tan mentada competitividad sino sólo para cambiar una muerte súbita por una agonía un poco más extendida en el tiempo”.
Fuente: DIB
