Un grupo de investigadores del Instituto de Arqueología, perteneciente a la Facultad de Filosofía de la Universidad de Buenos Aires (UBA-CONICET), exploran el pasado de los pueblos originarios de Santa Cruz, a fin de revalorizar su historia, sus prácticas y derechos.
A partir de fines del siglo XIX y en tan sólo unas pocas décadas, en la provincia de Santa Cruz colonos criollo-europeos ocuparon los territorios indígenas, respaldados por las políticas estatales que se apropiaron de esas tierras para incorporarlas al Estado-Nación. En consecuencia, muchos indígenas fueron reubicados en reservas, algunos corridos a zonas más marginales y otros absorbidos como mano de obra en estancias u otros emprendimientos rurales y urbanos.
Estos fueron solo algunos de los mecanismos que se usaron para borrar la identidad indígena y forzar a que fueran invisibilizados por la sociedad. Es entonces que, para lograr resistir, en pocas generaciones, dejaron de exteriorizar o transmitir algunas de sus prácticas culturales; entre ellas, la lengua.
La licenciada María José Figuerero, profesora Adjunta en la Facultad de Filosofía y Letras (IARQ-UBA) explicó a la Agencia CTyS-UNLaM: “Comenzamos nuestro trabajo estudiando la materialidad del pasado desde el campo de la arqueología y, luego, incorporamos una perspectiva antropológica, lo cual es importante porque, desde el principio, queríamos investigar la continuidad de la historia indígena hasta el presente”.
“Nos acercamos a la municipalidad de Los Antiguos, ubicada en Santa Cruz, para ofrecer colaboración y, desde el área de Turismo, nos mencionaron que había una serie de preguntas que les hacían los turistas, que habían recopilado, para ver si nosotros podríamos contestarlas, ya que casi todas se referían al pasado indígena de la localidad”, aseguró la investigadora.
“Las preguntas remitían al pasado en su mayoría, lo que nos llevó a darnos cuenta que necesitábamos información de las comunidades actuales. Es así que comenzamos un exhaustivo trabajo de búsqueda de referentes indígenas actuales, hasta que dimos con representantes de las comunidades de Caleta Olivia y Las Heras”.
A partir de que los referentes les proporcionaran la información necesaria para la publicación del libro “Huellas de Los Antiguos”, publicado por el municipio en el año 2008, lograron encontrar respuesta a dichas preguntas.
Más recientemente, el equipo contribuyó a la redacción del texto de un folleto explicativo y de varias audioguías disponibles en la web de la Secretaría de Estado de Turismo de la provincia, con información sobre el pasado y presente de los pueblos originarios, la historia regional y los cambios del paisaje en los últimos 10 mil años a lo largo de la Ruta provincial 41, además de brindar charlas y capacitaciones para el personal municipal y para el público local.
Las identidades tehuelche, mapuche y mapuche-tehuelche son las que sostienen los indígenas patagónicos para autodenominarse, designar su pertenencia, reafirmar su identidad y recuperar sus prácticas culturales. En la actualidad, en la provincia, ya hay organizadas quince comunidades territoriales y urbanas.
Por su parte, el doctor Guillermo Mengoni Goñalons, director del proyecto, destacó: “Pudimos entender mejor qué significados tienen para ellos los objetos arqueológicos, el territorio, y demás aspectos de sus prácticas. Fue una enseñanza para nosotros los académicos como nuevas formas de entender la realidad, ya que de alguna manera lo que estudiamos constituye parte de la memoria de los pueblos originarios”.
La comunicación y diálogo para entablar la vinculación con los referentes de las comunidades originarias, se llevó a cabo a distancia a través de diversas tecnologías como redes sociales, correo electrónico, entre otras, que se fueron adaptando a la disponibilidad tecnológica de cada uno de los referentes.
Este trabajo en conjunto con las comunidades en el 2018 y 2019, se enfocó en un proyecto de la Secretaría de Turismo de Santa Cruz para un Centro de Interpretación para la localidad de Los Antiguos con el tema de “Las comunidades originarias actuales”.
“Todo el proyecto implicó el análisis de archivos documentales sobre la región pero también un trabajo de reflexión hacia el interior de nuestro equipo, en relación con la forma de presentar discursivamente el trabajo con las comunidades en el presente, qué líneas de investigación son prioritarias y tratar de buscar la participación colaborativa con las comunidades”, agregó Mengoni Goñalons.
Invitación a la Mesa de Diálogo
En el año 2017, una de las comunidades realizó una demanda al gobierno nacional y provincial ante la falta de consulta previa libre e informada por las construcciones de las represas hidroeléctricas sobre el Río Santa Cruz. El proceso judicial mandó a conformar una Mesa de Diálogo entre el estado y las comunidades que comenzó formalmente en marzo del 2018 y continúa hasta ahora.
“Las comunidades indígenas me propusieron ser su asesora en el aspecto arqueológico del proceso, esto significó algo novedoso porque es parte de un nuevo aspecto profesional que implicó conocer más comunidades de Santa Cruz que no habíamos contactado”, dijo la licenciada.
“Nuestro trabajo tiene un impacto en la esfera social y, por eso, hay que tener consideraciones éticas, en las formas en que concebimos a los pueblos originarios y también políticos, ya que afecta en la manera en que luchan por integrarse y cómo se conforman en la sociedad”, concluyó Figuerero.
Agustina Lima (Agencia CTyS-UNLaM)