De acuerdo a los resultados del Censo 2022, el 2,9% del total de la población se reconoce indígena o descendiente de población indígena. En territorio bonaerense se encuentran presentes 18 pueblos originarios y 118 comunidades de raíz ancestral.

Salón de los pueblos originarios Isabel Pallamay, Sitio de Memoria, ex Pozo de Quilmes. (Gentileza Consejo Provincial de Asuntos Indígenas)

El 12 de octubre es una fecha compleja: revisa sentidos, ahonda en las páginas invisibilizadas de la historia y se presenta como una oportunidad para repensar la identidad nacional. Día de la Raza, luego Día del Respeto a la Diversidad Cultural, otra vez Día de la Raza. Una efeméride que, como otras, deja en claro que todo lo que se nombra y cómo se lo nombra, guarda en su significado relaciones de poder.

La fecha recuerda la colonización de América, la imposición de una cultura sobre otras, preexistentes, por la fuerza. El 12 de octubre de 1492 Cristóbal Colón logró concretar la primera travesía de la corona española por el Atlántico que pisó tierra caribeña. Cinco siglos después, urgen respuestas o, al menos, la necesidad de plantear interrogantes sobre la cuestión indígena pasada y presente en la historia del continente americano.

En Argentina, recién en el censo poblacional de 2001 se incorporó una pregunta para caracterizar a la población indígena. Si bien anteriormente se habían realizado ocho censos nacionales de población – en 1869, 1895, 1914, 1947, 1960, 1970, 1980 y 1991 – en los tres primeros, la temática tuvo un tratamiento parcial y en los demás no fue considerada.

En el Censo 2010 se incluyó una pregunta en el cuestionario ampliado del hogar, y fue recién en el Censo 2022 que se definió que todas las viviendas particulares, todos los hogares y toda la población tendrían un cuestionario único, con una pregunta relativa al autorreconocimiento indígena para ser respondida por cada persona del hogar sin excepción. Asimismo, en el Censo 2022 se incluyó una pregunta relativa al nombre del pueblo indígena u originario respecto del cual la persona podría reconocerse y también se preguntó sobre la comprensión y conocimiento de la lengua.

Representantes de comunidades indígenas frente el Congreso Nacional. (Consejo Provincial de Asuntos Indígenas)

El hecho de que el Estado se haya preguntado por la cuestión indígena en un procedimiento estadístico poblacional recién en el nuevo milenio, entrado siglo XXI, hace apenas tres años, es un dato sumamente elocuente. Deja a la vista que la discusión histórica sobre una identidad plurinacional, considerando la raíz ancestral originaria con seriedad y respeto, está en ciernes.

De acuerdo a los resultados del Censo 2022, el 2,9% del total de la población en viviendas particulares se reconoce indígena o descendiente de población indígena, lo que alcanza 1.306.730 personas. El 29,3% de los encuestados aseguró hablar o entender la lengua de su pueblo y, en total, a lo largo del país, se reconocieron 58 pueblos originarios o indígenas.

Las provincias de Jujuy, Salta, Chubut, Formosa, Neuquén y Río Negro son las que presentan mayor proporción de población indígena autopercibida respecto del total de población (entre el 10,1 y el 6,4%), mientras que Corrientes y Entre Ríos constituyen las provincias con menor porcentaje (1,3%). La provincia de Buenos Aires, por su parte, arrojó un 2,1% de reconocimiento de población indígena o descendencia. Lo cierto es que, con estos datos, es innegable e injusto creer que la cuestión originaria es algo vinculado al pasado. La identidad indígena es presente y convivimos en ella.

La Constitución Nacional en el artículo 75 inciso 17 reconoce la personería jurídica de las comunidades indígenas; en la misma línea, la Constitución Provincial en su artículo 36 inciso 9 reivindica la existencia de los pueblos indígenas en su territorio, garantizando el respeto a sus identidades étnicas, el desarrollo de sus culturas y la posesión familiar y comunitaria de las tierras que legítimamente ocupan.

Desplazamientos forzados y migraciones

En la provincia de Buenos Aires, de acuerdo al Censo 2022, 371.830 personas se reconocieron indígenas y, actualmente, se estima que suman unas 500.000. Además, en territorio bonaerense se encuentran presentes 18 pueblos originarios y 118 comunidades, la mayoría concentrada en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).

“El Registro Provincial de Comunidades Indígenas (Reproci) comenzó a funcionar en 2016, muy de a poco, y luego en 2020 repuntó; pasada la pandemia pudimos entregar, entre 2022 y 2023, unas 22 personerías jurídicas que estaban atrasadas”, cuenta a Agencia DIB Nehuén Sosa, Secretario Ejecutivo del Consejo Provincial de Asuntos Indígenas (CPAI), organismo que coordina el Reproci, bajo la órbita de la Secretaría de Derechos Humanos bonaerense.

Según explica Sosa, la provincia de Buenos Aires es la que cuenta “con mayor cantidad de pueblos nación” del país. “Tenemos presencia de 18 pueblos nación de acuerdo a un censo realizado hace unos años y creo que hoy, si lo actualizamos, hay mayor presencia de pueblos indígenas”, agrega.

“Los originarios que ocupaban la provincia de Buenos Aires, considerando el pasado antes de la llegada del español, eran tres según la historia: los querandíes en el centro, en el norte los guaraníes, y en el sur y el centro teníamos a los mapuches”, indica Sosa.

En la actualidad, la población indígena que habita territorio bonaerense es mayor y más diversa por distintos factores, que se fueron dando a lo largo del siglo XX, luego de la llamada Campaña del Desierto (1878-1885).

“Esta nueva composición de la población se fue dando por destierro, ya sea de empresas o del Estado; por migración forzosa, como ocurrió con las comunidades Kolla y Qom; o en busca de una mejora económica, laboral y social, por eso la mayoría se aloja en el Conurbano, en la zona industrial”, distingue.

“Son comunidades urbanas, distintas a las rurales del interior, que conservan el territorio preestablecido ancestral; hay pocas comunidades que tienen territorio propio en la provincia: hay una en Florencio Varela, que es Guaraní; en Derqui, Pilar, Marcos Paz y San Nicolás hay comunidades Qom; y, en Los Toldos y Carhué, Mapuche”, añade el titular del CPAI.

Cabe señalar que los atributos o características de una comunidad indígena o identidad étnica son los que resulten significativos para ese grupo, en el contexto histórico y espacio temporal en el que estén viviendo. La vigencia de la lengua, de ciertas prácticas culturales, pueden ser importantes o no, pero no quitan identidad en caso de no haber sido revalorizadas en el tiempo.

Racismo estructural: un problema subyacente

Los procesos de racialización estructural y los micro racismos operan sobre las identidades indígenas de forma invisibilizada. Muchas personas no se reconocen en su identidad hasta que llegan a Buenos Aires, o si son de pueblos alejados de capitales provinciales, también se da el mismo proceso al arribar a las ciudades o zonas suburbanas.

El discurso hegemónico de la sociedad argentina blanqueada, “bajada de los barcos” y constituida por la inmigración europea, fue asumido y aprendido durante décadas en todo el territorio nacional. La escuela ha sido la institución encargada de esa homogeneización desde hace más de cien años. Pero en la vivencia del contacto, en la discusión pública, en el planteo problematizador de la identidad cultural, la percepción cambia.

En tanto, acerca del reconocimiento de la raíz indígena de la población argentina, Sosa hace hincapié en el racismo estructural como problema subyacente que opera fuertemente en la sociedad, invisibilizando adrede la cuestión originaria.

“Es un proceso auto reconocerse indígena, hay vergüenza, opera fuertemente el racismo estructural y lo aprendido en la escuela durante generaciones, lo vemos cuando los jóvenes empiezan a revisar su historia y sus abuelos recuerdan que no hablaban la lengua originaria porque el patrón de estancia no los dejaba, o sufrían una serie de imposiciones vinculadas a la cultura, comida, la vestimenta, la religión, que fueron borradas durante décadas intencionalmente”, reflexiona.

Si bien el paradigma sobre el reconocimiento de la cuestión indígena como una identidad presente, viva, que necesariamente debe ser reivindicada como parte de la conformación nacional pareciera haber empezado a romper algunas viejas creencias, aún no impacta en la ciudadanía con la importancia que amerita, ya que se presenta desde un costado más “folclórico”, como es, por ejemplo, la extensión de la celebración de la Pachamama y la toma de caña con ruda durante el mes de agosto, casi como “una moda”.

“No está mal que pase el reconocimiento de la raíz indígena por ese lado más folclórico, pero hay que profundizar. La modernidad también está atravesada por lo indígena y se lo invisibilizó a propósito. Por ejemplo, usamos muchas palabras que son indígenas, como los nombres de algunas ciudades. Quilmes, se funda por la llegada de los indios Quilmes, que los trajeron de Tucumán caminando más de 1600 kilómetros. Traídos. Es necesaria la revisión de la valoración de la raíz ancestral”, plantea Sosa.

Reconocimiento a comunidades indígenas en La Plata. (Gentileza Consejo Provincial de Asuntos Indígenas)

La provincia de Buenos Aires se reconoce como territorio plurinacional al considerar, concretamente, la existencia de pueblos nación de raíz originaria. En esa línea, Sosa expresa que es muy importante que los funcionarios públicos que trabajen para tramitar la personería jurídica de las comunidades estén formadas en la temática, ya que “la población indígena o cada comunidad tienen sus tiempos, sus formas de organización”. Y suma: “En la provincia de Buenos Aires reconocemos a todos los pueblos y comunidades. Las alentamos a que tramiten su personería jurídica, ya que ese estatus les da otra capacidad de acción, como el reclamo territorial y el de diversas reivindicaciones”.

Cómo inscribirse en el Reproci

Las comunidades indígenas que quieran inscribirse en el Registro Provincial de Comunidades Indígenas (Reproci) pueden hacerlo a través de la página, donde están los documentos para descargar, en forma presencial o solicitando información por teléfono o correo electrónico.

  • Dirección: calle 56 n°668 (entre 8 y 9), 4º piso, La Plata.
  • Teléfono: (0221) 421-3353/4931/3195, internos 107 y 136.
  • Correo electrónico: [email protected]

Por Ana Roche (DIB)