El pasado industrial de la ciudad de Campana se ve reflejado en las numerosas empresas que supo cobijar desde mediados del siglo XIX.
Hoy, ya entrado el siglo XXI, el perfil industrial de esta ciudad no ha pasado desapercibido. Los años transcurridos, las empresas que se han establecido, le fueron dejando ciudadano local marcas y huellas de su paso, como también su impronta cultural, y para aquellos que han venido de otros lugares, para radicarse en la ciudad. Es que Campana tiene un atractivo especial, “un algo” que atrapa a aquellos que optan por construir un futuro en ella. Sea por el presente promisorio, o por ese arrastre cultural de bellas costumbres, transmitidas de boca en boca, de generación a generación, el “inconsciente colectivo” de los que en ella habitan, la han hecho grande. Y es por esto que ese cúmulo de costumbres ancestrales, que actualmente se siguen manifestando, forma parte de la historia rica de nuestra ciudad, y de ella el engrandecimiento de nuestro país.
Claudio Valerio, ingeniero de profesión e historiador por vocación, es uno de los tantos ciudadanos de Campana y, atraído por esta ciudad que forma parte del corredor más importante desde el punto de vista comercial, como lo es la Ruta 9 (que une a dos grandes, como lo son Buenos Aires y Rosario), y que la vincula con el corredor vial del Mercosur, ha llevado adelante distintas iniciativas de manera que se reflejen los aspectos mencionados; una de ellas escribir el libro “Asado de tira. Clásico argento, orgullo campanense” con el fin de que se pueda interpretar las causales del crecimiento demográfico propio y de la región reflejando el impacto producido la instalación en esta ciudad del primer frigorífico de Sudamérica.
Esta obra, declarada “de interés legislativo” por el Honorable Concejo Deliberante, se fundamenta a partir de un trabajo de investigación que realizara, en donde se asocia el origen campanense del asado de tira, por la instalación del frigorífico “The River Plate Fresh Meat & Co”, y su vinculación con la primera industrialización de la ciudad, en donde se concluye que, desde el primer frigorífico, se comenzaría a consumir la tira de asado. En este aspecto se pretende la institucionalización de un día de celebración, considerando a la ciudad como “Capital del Asado de Tira”, con lo que promovería el turismo y desarrollo local, con expectativas de lograr alcance provincial que le permitiría, a la comuna en particular, y a la los habitantes en general, tener un mayor conocimiento del acervo folclórico local, desarrollado a finales del Siglo XIX, en el marco de un proceso industrial histórico, como fuera el desarrollo de la industria frigorífica.
Por su afición al cine, junto con sus dos amigos Héctor Herrera y Daniel Pelayo, se han creado tres asociaciones sin fines de lucro, abocadas a la difusión del cine independiente. Los tres, a través de estos emprendimientos independientes, desean fomentar el aprendizaje y la Investigación en el Ámbito del cine y la imagen en general, como también sensibilizar a la población de la importancia del cine como manifestación cultural que posibilita diferentes lecturas de nuestro presente más actual y nuestro pasado histórico.
Hoy por hoy, y ya finalizado el tercer largometraje, “El Pago de las Almas” (escrita y dirigida por Daniel, y que Claudio se encarga de la producción ejecutiva), tanto el ingeniero sus amigos como Daniel y Héctor, están trabajando “a pulmón”, para realizar y poder llegar a proyectar un nuevo film el que, como los otros ya realizados, estará protagonizada por competentes actores locales, con gran vocación en todo lo concerniente a la cultura cinematográfica, y que gustosos participan del rodaje.
Para concluir, podemos decir que a este nuevo proyecto cinematográfico anhelan finalizarlo a mediados del año próximo… ¡Qué emprendedores estos ciudadanos campanenses!
Columna de Claudio Valerio
