Luego de tres meses de tímida recuperación, la actividad económica volvió a desplomarse en un 6,8% anual

Un recrudecimiento de la recesión al comienzo de la campaña electoral plantea un escenario complejo para el Gobierno, justo en el momento en el que cobra fuerza la discusión sobre la fórmula presidencial del oficialismo.

Este miércoles, el INDEC confirmó que la actividad económica en marzo tuvo un desplome del 6,8% en comparación con el mismo mes del año pasado.

Sin embargo, el dato que mayor alarma genera es que la economía volvió a caer en comparación al mes anterior, con un descenso de 1,3% frente a febrero. De esta manera, rompe una “racha” de tres subas seguidas intermensuales que se registraron en diciembre (0,4%), enero (0,1%) y finalmente febrero (0,1%).

Si bien se trató de una serie de tímidas mejoras, habían despertado cierto optimismo -hoy contrariado por los hechos- en el equipo económico. De hecho, fuentes de hacienda llegaron a sostener que los números de febrero consolidaban “la visión de que el piso de la recesión se habría alcanzado en noviembre”.


El Estimador Mensual de la Actividad Económica (EMAE) del INDEC reúne a varios de los indicadores que conforman el Producto Bruto Interno (PBI). En marzo, casi todos los segmentos cerraron con bajas interanuales, salvo Agricultura y Ganadería, que aumentó 10,8% interanual, Enseñanza, 1%, y Servicios Sociales y Salud, 0,2%.

El despegue en el rubro agropecuario estuvo impulsada por la cosecha de trigo, que finalizó con una producción récord de 19 millones de toneladas.


El rubro más afectado fue el comercio (minorista, mayorista y reparaciones), que tuvo un retroceso de 14,6%. Le siguió la industria manufacturera, con un descenso del 13,2%. En tanto, la construcción retrocedió 7,1%, siempre en la comparación contra marzo de 2018.

Fuente: iProfesional