NO SÓLO EL COVID-19 ES CONTAGIOSO.  EL ENTUSIASMO, TAMBIÉN

Por Claudio Valerio – “El entusiasmo es contagioso. Del mismo modo, la falta de él”. ¿De qué manera nosotros, por nuestro actuar, hemos contagiado al mundo?

¿Estamos ofreciendo oportunidad para que todos encuentren la paz verdadera, el perdón de los errores y fallas, o estamos empujando a aquellos que están a nuestro alrededor y confundidos, para alejarlos hacia un abismo de tristeza y perdición?

Debemos hacer la diferencia en un mundo rodeado de ilusiones y mentiras. Debemos ayudar a los perdidos a encontrar el buen camino.

Tenemos que mostrar la verdad y ahuyentar la mentira. Tenemos que llevar a las personas a la vida y no a la muerte espiritual.

La población de Argentina es de gran importancia hoy. Hablo de las personas sanas espiritual y mentalmente transformadas y no de los especuladores que intentan, de alguna manera, “engañar a los primeros”.

Quienes buscan y hacen el bien, oyen una voz que sale de su interior y no se deja engañar por los lobos mezclados en el rebaño.

Necesitamos contagiar los ambientes con la presencia de la luz de las buenas obras. Y si estos entornos son sombríos, dejar que esa luz brille mucho, disipando toda oscuridad y engaño.

¿Tus actitudes contagian a quienes te rodean?