Por una baja en la producción, faltan vacunas antirrábicas para humanos en todo el país

El problema alcanzaría otros países de América Latina. Como Plan B, las autoridades locales piden poner foco en la vacunación canina.

Se difundió poco, pero el fenómeno tiene meses: desde mediados de 2018 escasea en la Argentina la vacuna antirrábica para humanos. Falta en todas las provincias, jurisdicciones y centros de salud públicos y privados.

Traducido a la vida cotidiana significa que, de no tener la suerte de dar con un centro de salud que cuente con alguna dosis, tras una mordedura canina habrá que poner las fichas en: a) encontrar al perro mordedor, b) llevarlo –con las dificultades que eso implica- a algún centro de zoonosis, y c) cruzar los dedos para que no tenga rabia.

Las autoridades de Salud explican que el problema no es local sino regional: el laboratorio Sanofi Pasteur, que la produce y distribuye a través de la Organización Panamericana de la Salud, simplemente bajó su producción y nadie sabe exactamente por qué.


En la ciudad de Buenos Aires, quien necesite aplicarse la antirrábica humana y busque alguna sede con dosis disponibles en el laboratorio Stamboulian, por dar un ejemplo, verá que no es una figurita fácil.


¿Y en el resto del país? 

La única provincia que alzó la voz en estos meses fue Jujuy, que emitió una alerta sanitaria. Las cifras en esa provincia son elocuentes: en 2016 Jujuy había recibido 21.338 dosis, y para el primer trimestre de este año, sólo obtuvo 250.

Fuente: Clarín