Identificaron a un 63% de pacientes que luego sufrieron la enfermedad. Es para fumadores y ex fumadores.
Un nuevo análisis de sangre que evalúa cuatro indicadores o biomarcadores proteicos mejora significativamente la detección del riesgo de padecer cáncer de pulmón, informó la Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer (IARC).
Este método ayuda a identificar a personas que deberían hacerse un escáner TAC, una prueba radiológica de rayos X habitualmente usada para el diagnóstico de esa enfermedad.
Uno de los principales investigadores del estudio, Mattias Johansson, precisó que esta es “la primera vez que se emplea el análisis de sangre en un contexto de detección precoz de cáncer de pulmón en personas sanas”. Este nuevo modelo toma en cuenta el consumo de tabaco del individuo y analiza los niveles en la sangre de las proteínas CA125, Pro-SFTPB, CYFRA 21-1 y CEA, algunas de las cuales, como la CYFRA 21-1, ya se examinan individualmente para diagnosticar otros tipos de cáncer, como el de ovario.
El estudio analizó sangre de enfermos de cáncer de pulmón cuando estos todavía no habían desarrollado la enfermedad.
Este nuevo sistema de detección de la enfermedad, según Johansson, identificó a un 63% de futuros pacientes, entre fumadores y ex fumadores, mientras que el porcentaje con los actuales criterios para someterse luego a un seguimiento exhaustivo ronda el 42% en los Estados Unidos.
El objetivo de este estudio fue evaluar si el análisis de moléculas presentes en la sangre puede facilitar la identificación de fumadores y ex fumadores que sufrirán cáncer de pulmón en el futuro. Para ello los autores analizaron las muestras de sangre de 108 fumadores a los que se les diagnosticó cáncer de pulmón en los 12 meses siguientes a la extracción de sangre. Luego las compararon con las de otras 216 personas también fumadoras pero que no desarrollaron el tumor (el grupo control).
El cáncer de pulmón representa el 20% de todas las muertes por cáncer en el mundo y la amplia mayoría del 80-90% son causados por el tabaquismo, según confirma la IARC, entidad que forma parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Fuente: Clarín