Cumplió. De eso no hay duda. Con una primera bastante más positiva y esperanzadora, que fue la base para cumplir su meta, Defensores Unidos cerró su regreso a la B Metropolitana, concretando su objetivo de sostenerse en la divisional para la temporada que viene. Un campeonato que para CADU tuvo mucho altibajos, no sólo en los rendimientos colectivos, sino también en los resultados, donde el inicio y el cierre fueron de lo más negativo para los dirigidos por Darío Lema. Vale recordar que en el arranque CADU había sufrido cinco derrotas en sus primeros seis partidos, mientras que en el desenlace quedó con siete presentaciones sin victorias. Lo bueno estuvo en el trayecto medio, principalmente en lo ocurrido en los últimos meses del 2018, donde el “celeste”
Quizás para los más ambiciosos, quedó la sensación de que el equipo pudo haber logrado algo más en el tramo final de la temporada, donde CADU llegó en carrera para poder aspirar a un lugar en el Reducido, pero sólo acumuló 5 puntos de los últimos 21 que tuvo en juego, permitiéndole sólo lograr su principal objetivo de mantenerse en la categoría.
