Se demostró, en base a un nuevo estudio, que la vacuna triple vírica no provoca autismo

Un nuevo estudio vuelve a confirmar este hecho alimentado por el fraude que relacionó vacunas y autismo en 1998.

El estudio que alteró los datos sobre el historial de los pacientes y que provocó una ola de pánico hacia las vacunas que aún hoy continúa, ha recibido una nueva evidencia científica: un estudio danés a gran escala busca conexiones entre el autismo y la vacuna triple vírica, no encontrándose ningún enlace entre ambos.


Un artículo publicado en 1998 describió por primera vez un vínculo entre la vacuna contra el sarampión, las paperas, la rubéola y el autismo: tanto los hallazgos como investigadores principales fueron completamente desacreditados.


 

Los investigadores, del Statens Serum Institut en Copenhague, Dinamarca, tomaron datos de un registro de población danés. En total, tuvieron acceso a datos de 657.461 niños; de estos, 6517 recibieron un diagnóstico de autismo durante los 10 años de seguimiento.


En análisis adicionales, también buscaron vínculos entre las distintas vacunas distintas de la triple vírica y el autismo; de nuevo no encontraron ninguno.


Una de las principales fortalezas del estudio es la gran cantidad de individuos incluidos en el análisis. Según escriben los autores, el tamaño del estudio les permitió concluir que “es improbable que se produzcan incrementos mínimos en el riesgo de autismo después de la vacunación con triple vírica”.

Fuente: Muy Interesante