Se lanzó esta novedosa opción del Laboratorio nacional ELEA que elimina la necesidad de inyecciones y mejora la adherencia al tratamiento y el control de la glucosa. Se reabre el debate del producto off label para los que además buscan la droga para adelgazar.
La Semaglutida volvió a ser noticia: un laboratorio argentino lanzará en los próximos días la primera droga nacional para el tratamiento de la diabetes tipo 2. La novedad es del laboratorio Elea, que ha presentado una innovación en el tratamiento para esta enfermedad: se trata de la primera versión oral, un avance que promete mejorar la calidad de vida de miles de personas que viven con esta enfermedad crónica.
Esta solución elimina la necesidad de inyecciones, haciendo que el tratamiento sea más accesible y cómodo para los pacientes.
La semaglutida se prescribe para tratar la obesidad de manera “off label”, lo que significa que se utiliza bajo indicación médica fuera de las aprobaciones oficiales del medicamento.
Con la llegada de la versión oral de este medicamento, se busca marcar un antes y un después en el tratamiento de la diabetes en el país. “El lanzamiento de la semaglutida oral en Argentina es un hito en el tratamiento de la diabetes tipo 2″, explicó el Dr. Matías Deprati, director de Asuntos Médicos de Laboratorio Elea.
“Sabemos que muchos pacientes encuentran difícil adherirse a los tratamientos inyectables, por lo que esta nueva opción representa una solución más accesible y fácil de integrar en su vida cotidiana”, agregó.
La obesidad, una enfermedad de múltiples causas, se ha convertido en una de las grandes epidemias del siglo XXI y un serio problema de salud pública. A lo largo de los últimos años, la medicina ha logrado importantes avances en su tratamiento integral, pero las nuevas drogas autorizadas a nivel mundial han revolucionado el enfoque terapéutico.
La diabetes tipo 2 es una de las enfermedades crónicas más comunes a nivel mundial, afectando a más de 463 millones de personas, según datos de la Federación Internacional de Diabetes. En Argentina, el 12.7% de los mayores de 18 años conviven con esta afección, según la última encuesta nacional de factores de riesgo. El control de la enfermedad es crucial para evitar complicaciones como enfermedades cardiovasculares, daño renal, neuropatías y retinopatías.
Hasta ahora, la semaglutida solo estaba disponible en forma inyectable, lo que generaba ciertas dificultades para la adherencia de los pacientes al tratamiento.
La semaglutida es un análogo del péptido similar al glucagón (GLP-1), un compuesto que regula la secreción de insulina y disminuye los niveles de glucosa en sangre. Además, se ha demostrado que promueve la pérdida de peso, un beneficio clave para muchos pacientes con diabetes tipo 2.
“Hay una clase de medicamentos para la diabetes tipo 2 que no solo mejora el control de la glucosa en la sangre, sino que también puede ayudar a bajar de peso”, explica Regina Castro, endocrinóloga de Mayo Clinic.
En diálogo con Infobae en una nota anterior, el médico y experto en obesidad Alberto Cormillot explicó que la semaglutida es un fármaco “análogo”. Se la llama así “porque es parecido a algo que produce el cuerpo”. En este caso, es la hormona GLP1 que “la produce el cuerpo cuando la persona come”.
“Este nuevo medicamento no solo cambia el panorama terapéutico, sino que brinda a los pacientes la oportunidad de controlar su enfermedad de manera más cómoda y eficaz”, indicó la Dra. Fabiana Vázquez, médica diplomada en diabetes.
Según los estudios clínicos realizados, la semaglutida oral puede reducir los niveles de hemoglobina glicosilada en un 1.4-1.5% y lograr que el 70% de los pacientes alcancen los objetivos de control glucémico. La pérdida de peso promedio registrada en los ensayos clínicos fue de entre 4 y 6 kilogramos, un factor importante en pacientes que también enfrentan el desafío del sobrepeso.
Una de las mayores ventajas de esta nueva formulación es la conveniencia. Al eliminar la necesidad de inyecciones, se espera que más pacientes puedan adherirse al tratamiento sin los inconvenientes que estos dispositivos inyectables suponen. “Muchos médicos no se encuentran familiarizados con el uso de los dispositivos inyectables”, comentó Deprati, “por lo que esta nueva opción oral representa una solución eficaz en el control de la enfermedad”.
Este cambio también podría optimizar los recursos del sistema de salud, ya que mantener un control metabólico efectivo reduce la necesidad de afrontar complicaciones a largo plazo, lo que implica menores costos para los pacientes y el sistema en general.
Impacto en la salud cardiovascular
Además de los beneficios en el control glucémico, la semaglutida ha demostrado tener un impacto positivo en el riesgo cardiovascular.
La Dra. Florencia Aranguren, especialista en medicina interna y miembro del capítulo de diabetes de la Sociedad Argentina de Cardiología, mencionó: “La semaglutida por vía oral ha demostrado ser altamente eficaz en la reducción de los niveles de glucosa en sangre y en la disminución de la hemoglobina glicosilada. Además, promueve la pérdida de peso, lo que es clave en los pacientes con diabetes tipo 2″.
En términos de seguridad, la versión oral de la semaglutida mantiene un perfil robusto y similar a su versión inyectable. El Dr. Carlos Castellaro, médico especialista en nefrología del CEMIC, comentó: “Este medicamento por vía oral ofrece un perfil de seguridad robusto, con eventos secundarios mínimos que tienden a disminuir con el tiempo. Esto lo convierte en una nueva opción segura y bien tolerada para la mayoría de los pacientes”.
Entre los efectos secundarios más comunes se incluyen náuseas leves, que suelen desaparecer a medida que el cuerpo se adapta al tratamiento. La tolerabilidad general del medicamento ha sido satisfactoria, lo que refuerza su potencial para mejorar la vida de las personas con diabetes tipo 2 en Argentina.
La droga semaglutida fue diseñada originalmente para el tratamiento de la diabetes tipo 2, comercializada bajo el nombre Ozempic™ (en dosis inyectables de 0,25; 0,5 y 1 miligramo).
Luego también fue aprobada para el tratamiento de la obesidad, comercializada bajo el nombre Wegovy™ (semaglutida inyectable de 2,4 mg) en Estados Unidos, Europa y varios países de Asia.
En Argentina estuvo en un primer momento solo autorizada Ozempic™ para pacientes con diabetes tipo 2. La Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) autorizó luego a Wegovy™ para el tratamiento de la obesidad.
Por Daniela Blanco