Con sólo 18 meses de edad, le diagnosticaron una rara enfermedad que generalmente se desarrolla durante la pubertad.
El agua es vital para la vida. Sin embargo, a la pequeña Ivy Angerman, de 18 meses, cuando este elemento entra en contacto con su delicada piel le provoca graves irritaciones, e incluso sus propias lágrimas le lastiman la epidermis. Su madre espera que su pequeña...