Lo hizo luego de que el periodista Horacio Verbitsky reconociera que recibió una vacuna en el Ministerio, luego de pedírselo al funcionario.

El presidente de la Nación, Alberto Fernández, le pidió la renuncia al ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, a raíz del escándalo por las “vacunaciones VIP” en esa cartera, un hecho que fue destapado por el periodista Horacio Verbitsky, quien reconoció que fue vacunado luego de pedírselo al funcionario. En su lugar, el Presidente designará a Carla Vizzotti, hasta hoy Secretaria de Acceso a la Salud y virtual “número 2” de la cartera.

El escándalo se destapó esta mañana de boca del propio Verbitsky, quien contó en su programa de radio que ayer recibió una dosis de la vacuna Sputnik V en una oficina del Ministerio de Salud, luego de pedírselo al titular de la cartera sanitaria como un “favor” de “amigo”.

Con el correr de las horas se conocieron los nombres de otros “vacunados VIP” entre quienes se encontrarían el senador nacional por la provincia de Buenos Aires, Jorge Taiana, y el diputado Eduardo Valdés, quienes fueron “bajados” de la gira que Fernández emprenderá por México en las próximas horas.

Algunas fuentes agregaban además al sobrino de González García y jefe de Gabinete, Lisandro Bonelli (de 44 años). Según el diario Clarín, también formó parte del operativo el empresario de medios marplatense Florencio Aldrey Iglesias, y de acuerdo con La Nación, habrían sido vacunados además -en otra ocasión- el líder sindical Hugo Moyano, su esposa, Liliana Zulet, y su hijo Jerónimo, que tiene 20 años.

La noticia cayó como una bomba en el Gobierno y generó durísimas críticas en las redes sociales. Por la tarde, y cuando el tema ya se había convertido en un escándalo nacional, el presidente Alberto Fernández se reunió con el Jefe de Gabinete Santiago Cafiero y resolvieron pedirle la renuncia a González García.

Varias horas más tarde, luego de permanecer en el Ministerio junto a su grupo de colaboradores más estrechos, el ahora exministro presentó su renuncia formal, en la que buscó desligarse del escándalo al señalar que él se encontraba de visita oficial a la provincia de Entre Ríos y hubo una “confusión involuntaria de mi secretaria privada en la citación a las personas vacunadas en este Ministerio”.

Además, González García señaló que “lamentaría sinceramente que semejante malentendido pudiera deslucir una gestión que dio un fuerte impulso a la reconstrucción del sistema de salud, que recupera programas desmantelados por la gestión anterior”.

Finalmente, citó al propio Presidente en su presentación de esta mañana del Consejo Económico Social: “El odio entre sectores nos ha dejado una sociedad profundamente injusta, profundamente desigual. Por mi parte hice todo lo posible por restablecer el diálogo”.

Un reemplazo “natural”

Tras horas de frenéticas conversaciones, en tanto, Fernández resolvió nombrar a Vizzotti como ministra: una funcionaria con un bajo perfil natural que la pandemia del coronavirus obligó a la exposición casi diaria, muchas veces en reemplazo de González García.

Vizzotti será confirmada en el cargo esta madrugada a través de un decreto publicado en el Boletín Oficial. No habrá, de momento, conferencia de prensa ni anuncios.

El escándalo

Esta mañana Verbitsky contó con lujo de detalles el operativo de “vacunación VIP”: “Decidí vacunarme. Me puse a averiguar en dónde hacerlo. Llamé a mi viejo amigo Ginés González García, a quien conozco desde mucho antes de que fuera ministro”, comenzó.

El periodista indicó que el ministro “me dijo que tenía que ir al hospital Posadas. Cuando estaba por ir, recibí un mensaje del secretario de Ginés que me dijo que iba a venir un equipo de vacunadores del Posadas al ministerio y que fuera allí a darme la vacuna”. Además, señaló que tiene turno para la segunda dosis el 12 de marzo.

Verbitsky, quien semanas antes había dicho que prefería “esperar” antes de aplicarse la vacuna, indicó que cambió de opinión porque “pasaron varias cosas. Una muy grave: que tuve nueve contagiados en la familia. Es un número grande para una familia chica. Eran de todas las edades y sexos, desde más de 70 hasta de 1 año. Incluso, uno de ellos murió y fue un gran impacto para toda la familia”.Los dichos del periodista se dieron en medio de las denuncias que se replican en varios distritos del interior bonaerense por la aplicación de vacunas a militantes del Frente de Todos. Los casos se discuten en San Andrés de Giles, Chivilcoy, Henderson y Navarro, entre otros.