La llegada de la primavera es una época muy esperada por sus días soleados y temperaturas agradables e ideales para compartir actividades al aire libre. Sin embargo, también se presenta como un momento en el que muchas personas experimentan síntomas de alergias estacionales.

A menudo, pasamos por alto cómo estas alergias pueden afectar nuestra visión e impactar directamente en nuestra calidad de vida. Por este motivo, es necesario conocer cómo la primavera afecta a los ojos y como evitar cualquier tipo de problema en la visión.

A medida que la primavera comienza, la presencia de polen, ácaros, pelo y células cutáneas provenientes de la descamación de animales domésticos aumenta. Además, los rayos del sol son más fuertes y la exposición a ellos también. Estos factores pueden desencadenar en distintos problemas visuales, que afectan a un gran porcentaje de la población. Entre los síntomas más comunes se pueden encontrar:

  • Picazón, irritación: uno de los síntomas más comunes de las alergias primaverales son la picazón y la irritación en los ojos. Esto puede hacer que frotarse los ojos sea tentador, pero es importante evitarlo, ya que puede empeorar la situación.
  • Lagrimeo excesivo:  las molestias que se generan en los ojos despiertan mecanismos que incrementan la producción activa de lágrimas de forma abundante. La resequedad, otra forma de manifestación de cuadros irritativos,  hace que los ojos se tornen molestos, lo que estimula al organismo a producir demasiadas lágrimas.
  • Ojo seco o sequedad ocular: Ocurre cuando las lágrimas no pueden lubricar los ojos de forma adecuada. Si sufrís de ojos secos, es posible que estos te ardan o piquen, seas más sensible a la luz y te puede generar fatiga ocular.
  • Visión Borrosa: El exceso de lágrimas y la irritación ocular pueden llevar a la visión borrosa temporal, dificultando las actividades cotidianas.
  • Hinchazón de párpados (edema): se acumula líquido en los tejidos generando aumento del tamaño de los párpados y ¨bolsas¨ en la zona de los párpados inferiores.

¿Y cómo podemos proteger nuestros ojos en la primavera?

Afortunadamente, hay medidas que se pueden tomar para proteger los ojos y mantener una visión clara durante la primavera. En este sentido, la Dra. Ana Sanseau, Asesora Médica de Bausch + Lomb, recomienda el uso de anteojos de sol de calidad, ya que “pueden actuar como una barrera física contra el polen y otros irritantes ambientales para proteger tus ojos”.  Las gotas de lágrimas artificiales son una buena opción para aliviar los síntomas de la alergia ocular porque favorecen la eliminación y dilución de los alérgenos de la superficie ocular. Resultan una herramienta muy útil en el manejo de los síntomas de ojo seco como el enrojecimiento, prurito, lagrimeo y sensaciones de arenilla, brindándoles la humectación necesaria para protegerlos.

En casos de síntomas crónicos y severos de alergia, como picazón, enrojecimiento e hinchazón, las gotas para ojos con corticoesteroides pueden ser útiles. Sin embargo, es fundamental destacar que nunca se deben utilizar sin supervisión médica debido a posibles efectos secundarios serios. 

La consulta con un médico especialista es fundamental, especialmente si los síntomas oculares son persistentes. Esta es  la clave para para obtener un diagnóstico adecuado y un tratamiento acorde a los hallazgos clínicos.

Así que mientras nos perdemos en la maravilla de las flores y la belleza de la primavera, no hay que dejar que las alergias oculares impidan verlo todo con claridad.

Tomar medidas preventivas y buscar atención profesional frente a síntomas oculares, nos permitirá disfrutar plenamente de esta hermosa estación sin preocupaciones.