¿PARA QUÉ ESTÁN LOS CONCEJALES?

Por Eduardo Rivas – Hoy comenzaremos diciendo algo que seguramente no es muy común en una nota, pero preferimos actuar de manera honesta. Si no quiere aburrirse, no siga leyendo, porque lo que proponemos hoy es poder explicar la representación política puesto que hay muchos concejales que no entienden de qué se trata por más que vienen ejerciendo el cargo hace ya bastante tiempo.

En primer lugar debemos decir que las elecciones ‘ejecutivas’ municipales, es decir cuando se eligen todos los cargos locales, incluido el Intendente, son diferentes de las elecciones municipales exclusivamente legislativas, donde solo se eligen Concejales y Consejeros Escolares, porque ambas tienen concepciones diferentes. Mientras la elección ejecutiva es un juego de suma cero, la elección legislativa es un juego de suma positiva. ¿Qué quiere decir esto? Que mientras en las ejecutivas hay un solo ganador y múltiples perdedores en las elecciones legislativas hay múltiples ganadores y múltiples perdedores.

Cuesta entenderlo en la política argentina en donde el personalismo ha edificado un pensamiento en donde quien hace, deshace y es responsable de todo lo que ocurre en el Distrito es quien ocupa temporalmente el cargo  ejecutivo. Solo basta leer los comunicados del Municipio, donde todo se hace por obra y gracia de Osvaldo Cáffaro. El Intendente, en consecuencia, representa a la totalidad de la ciudadanía, porque es el único representante ciudadano electo en el Departamento Ejecutivo. Sin embargo no gobierna para toda la población, puesto que ella tiene múltiples intereses, algunos contrapuestos y cuando se gobierna se favorece a algunos y se desfavorece a otros.

En el Departamento Deliberativo la situación es muy diferente, pero son muy pocos los que así lo entienden. El Presidente del Cuerpo, Ariel Ríos, decía días atrás que él y su bloque eran representantes de toda la ciudadanía, afirmación que demuestra una ignorancia supina. El bloque del Frente de Algunos representa solo a algunos de quienes los votaron, mientras que su hermano el Frente de Algunos – Partido Justicialista, representa a los otros que los votaron. Lo mismo ocurre al otro lado en el recinto con Cambiemos y Juntos por el Cambio. Cada grupo de concejales representa a la porción de la ciudadanía que lo apoyó, por eso pueden representarse intereses contrapuestos, una propuesta absolutista y totalitaria como la de Ríos solo pregona el fin de la democracia, puesto que si su bloque representa a toda la ciudadanía no habría posibilidad que alguien pensara diferente, puesto que él representa a todos. Es asombrosa la ignorancia, salvo que se retracte, de un concejal que tanto tiempo ocupa el cargo y que, además, es Presidente del Concejo Deliberante. O quizás no sea ignorancia y en realidad es su pensamiento racional y meditado, lo cual sería más penoso… y peligroso.

Tengo miedo de contar lo siguiente porque si Ríos lo llegara a leer quizás le da un patatús, pero hay muchos ciudadanos zarateños que no tienen representación en el Concejo Deliberante. Son todos aquellos que votaron en blanco en alguna, o algunas, de las últimas dos elecciones o aquellos que votaron a alguna formación política que no obtuvo bancas en el Concejo por lo que no tiene representación en él, no hay ningún legislador que represente sus ideas.

Pero claro, esta es una cuestión esencial, los concejales deben representar los intereses y las ideas de sus votantes. Cuando los representantes se creen la encarnación de sus representados y como tales obran sin consultarlos con una autonomía con la que no cuentan, se interpreta diferente la historia.

No es cuestión de plantear un Estado asambleario, impracticable dada la complejidad que adquirió la sociedad zarateña, pero muy diferente es acordar en el seno del Concejo propuestas que mucho distan de las ideas, los principios y los valores que llevaron a algunos ciudadanos a ser elegidos como concejales.

La primera evidencia de esta realidad es la propia conformación de los bloques partidarios. Solo apetencias personales pueden justificar la conformación de dos bloques en cada uno de los dos frentes electorales ubicándose legisladores que compartieron boleta en bloques diferentes, al punto que algunos de ellos, por ejemplo Lorena Bustos, conforma el bloque de una fuerza inexistente al momento de su elección como concejal.

Pero la demostración más certera es el propio accionar de los concejales en el ámbito del Concejo. A lo largo de este período legislativo la oposición no convocó en ningún momento al Intendente a concurrir al recinto del Concejo Deliberante aunque sobraran razones para hacerlo. Al menos así se desprende de la información oficial publicada por el Concejo. De hecho fueron cómplices del Ejecutivo y el desinterés por la función deliberativa dejo el campo libre para que el Ejecutivo actuara a su antojo desde marzo a esta parte, al punto de, por ejemplo, haberse presentado en el mes de septiembre un solo proyecto de los bloques de Cambiemos y Juntos por el Cambio, compartido, y uno del Interbloque del Frente de Todos-PJ frente a seis proyectos del Ejecutivo. Es decir, no solo no hacen su trabajo sino que además hacen lo que el Ejecutivo quiere que hagan.

Solo en Salud, para tomar un ejemplo, sobran las razones para citar al recinto a los representantes del Ejecutivo para que expliquen los gastos realizados en el marco de la emergencia sanitaria, el porqué del incumplimiento de los protocolos, el porqué del incumplimiento de las normas legales, el porqué de la manipulación de los datos estadísticos, entre tantos otros porqué… pero para que eso ocurra deberían tener en claro para qué se es concejal, y visto lo visto, queda más que claro que no tienen ni remotísima idea de las funciones que deben cumplir, que va más allá de pasar por caja a fin de mes.

Los mismos que se escandalizaron por la aparición repentina de muertos no consignados en las estadísticas en la Provincia de Buenos Aires callan cuando en los primeros cuatro días del mes de noviembre el municipio informó 7 fallecidos por COVID-19… que no fallecieron en noviembre, exponiendo claramente la manipulación que se hace de las estadística oficiales… con la complicidad del Concejo Deliberante y los veinte concejales.

En consecuencia cada uno debe entender qué intereses populares representa… y tener la honestidad de asumir que cambió de intereses si así lo hizo. No se puede afirmar ser opositor cuando se es cómplice, no se puede afirmar que se representa a votantes que carecen de representantes. Pero tampoco se puede creer que se es el representante de toda la ciudadanía.

Deberían actuar, inicialmente, respetando el reglamento del Concejo Deliberante que se autoimpusieron y que violan sistemáticamente. Un claro ejemplo de ello es que no aprueban al inicio de cada sesión el acta de la sesión anterior, por ejemplo.

Se plantea ahora una nueva disyuntiva donde los representantes populares tendrán que elegir donde pararse, pues  el Intendente Municipal pidió por medio del Expediente N° 4121 ‘el otorgamiento de una prórroga hasta el 15 de diciembre del presente para la presentación del proyecto del Cálculo y Recursos, Presupuesto de Gastos y Planilla Complementarias, como Anexo de presentación del Cálculo y  Recursos, Presupuesto  de Gastos y Planillas Complememtarias del Organismo Descentralizado ENDEZA, ambos correspondientes al Año 2021, según lo dispuesto en el Artículo Nº 36 de la Ley Orgánica de las Municipalidades.’ (sic). Afirma el Intendente Cáffaro que ‘Motiva la presente solicitud hecho de no tener aún la certeza sobre los montos que recibirá el Municipio de Zárate, provenientes de los aportes a percibir tanto de la Nación como de la Provincia de Buenos Aires, y por lo cual se dificulta a la fecha realizar estimaciones y cálculos correspondientes’, los paladines del ‘hacer con lo nuestro’ no pueden presentar un presupuesto porque no saben cuánto dinero le van a girar desde el ámbito nacional y provincial. El intendente del ‘haciendo con lo ajeno’ calla y le oculta esta realidad a la ciudadanía y los concejales son cómplices de ese silencio.

Como los concejales aprobaron el pedido del Intendente, en 10 días hábiles, deberán estudiar, analizar, debatir, discutir y aprobar o rechazar el Presupuesto Municipal. Dada la experiencia de los últimos años, ¿Alguien cree a ciencia cierta que esto sea factible? Yo no.

Pero en Cáffarolandia todo es posible, porque los concejales no saben para que están, porque eligen el calor acomodaticio del poder al ingrato trabajo de decir verdades que duelen y la costosa tarea de trabajar en serio para modificar la realidad.

Cambiemos presentó 21 proyectos en lo que va del año, 0,07 proyectos por día. 7 proyectos por edil en lo que va del año, menos de 1 por mes por concejal.

Juntos por el Cambio presentó 15 proyectos en lo que va del año, 0,05 proyectos por día. 3 proyectos por edil en lo que va del año, menos de 1 por trimestre por concejal.

Frente de Todos-PJ presentó 20 proyectos en lo que va del año, 0,06 proyectos por día. Menos de 1 por trimestre, menos de 1 proyecto por concejal por mes.

Frente de Todos presentó 32 proyectos en lo que va del año, 0,10 proyectos por día. Apenas poco más de 3 proyectos por mes, bastante menos de 1 por edil.

Hay algunos proyectos compartidos entre varios bloques que son difíciles de identificar en la página oficial del Concejo Deliberante, que por cierto pone información limitada y parcial a disposición de la ciudadanía.

En contrapartida, el Concejo Deliberante recibió 33 proyectos del Departamento Ejecutivo. A las claras está que el Concejo trata lo que el Ejecutivo quiere que trate y aun así, después el Ejecutivo hace lo que quiere sin siquiera rendirle cuentas. Porque tampoco se las piden.

Hay responsabilidad compartida, sin dudas, pero los máximos responsables son quienes no hacen valer sus derechos, por vagancia o desconocimiento de para qué fueron elegidos, pero difícil es que lo hagan cuando no saben qué es lo que tienen que hacer… y cuando se les ofrece ayuda, la ignoran.