PREGUNTAS Y RESPUESTAS

Por Eduardo Rivas – Una y otra vez las autoridades municipales afirman que la responsabilidad de la seguridad ciudadana no es competencia del gobierno local, ignoramos si lo repiten cual loros por incompetencia o por ignorancia, porque la ley es clara al respecto y no admiten dobles interpretaciones. El artículo 178 de la Ley Orgánica de Municipalidades (https://www.mininterior.gov.ar/municipios/gestion/normativas/ley_organica_mun.pdf) establece que ‘El Intendente tendrá como auxiliares para el cumplimiento de sus atribuciones y deberes: 1° A los secretarios y empleados del Departamento Ejecutivo. 2° A los organismos descentralizados. 3° A las comisiones de vecinos que se nombren para vigilar o hacer ejecutar obras o prestar servicios determinados. 4° A las autoridades policiales establecidas en la jurisdicción de la Municipalidad.’, y en la cuestión de seguridad ciudadana quienes mejor capacitados están para prestar colaboración al intendente, al menos en términos teóricos, son los mencionados en el punto 4° del artículo, ‘las autoridades policiales establecidas en la jurisdicción de la Municipalidad’, son ellas quienes deben trabajar de manera mancomunada con las autoridades municipales a fin de encontrar soluciones concretas a los problemas que aquejan a los vecinos de Zárate. Por el momento es una tarea pendiente.

Para el año en curso el Municipio propuso, en la temática de Seguridad, programas sumamente generalistas y difusos. Desconocemos si nuestros concejales hicieron alguna observación al respecto, ya que no se hicieron públicas las correcciones realizadas al Proyecto de Presupuesto elevado por el Ejecutivo.

El ‘Gobierno Cáffaro’ entiende que la política en el área requiere ‘un abordaje integral con acciones concretas de índole social y comunitaria, que permitan evidenciar una disminución paulatina de la “Inseguridad” tanto en Zárate como en Lima. Se pretende establecer, fortalecer y proteger el orden de civil, disminuyendo las amenazas de violencia en la población y permitiendo una convivencia segura y pacífica. Se pretende salvaguardar los derechos de los ciudadanos de nuestras ciudades, tales como el derecho a la vida, la integridad personal, la inviolabilidad del domicilio y la libertad de transitar. No solo se apunta a la reducción de los delitos sino que se enfoca a una estrategia exhaustiva y diversa para mejorar la calidad de vida de la población, prevenir la criminalidad, con educación, tolerancia y respeto por la ley’, o lo que es lo mismo, escribir mucho para no decir nada, y que para conseguir este objetivo la Secretaría de Seguridad ‘realizará programa de capacitación integral para ejecutar en el transcurso del año 2020, ya que no es posible pensar en seguridad ciudadana sin adiestramiento e instrucción para nuestros agentes. Las capacitaciones contienen aspectos teóricos en materia de Seguridad Ciudadana y Seguridad Pública, y también ejemplos prácticos, protocolos ejemplificativos y esquemas de simulación/simulacro para ejecutar periódicamente, finalizando con evaluación tipo opción múltiple’. Ni siquiera la redacción del texto hacen bien.

El Departamento Ejecutivo local dedica las dos hojas finales de programas municipales a las cuestiones de seguridad, que paradójicamente es una de las primeras preocupaciones de los vecinos. Será que el intendente olvidó la época en que adornaba su despacho con un cuadro de la casa de Carlos Marx, aquel que entre otras cosas decía que la religión es el opio de los pueblos, y tras jurar por dios, crea en la parábola de la que habla Mateo en su Evangelio por aquello de ‘los últimos serán los primeros’, aunque en realidad tiene más que ver con el personaje de la canción ‘Muro de Berlín’ de Joaquín Sabina (https://www.youtube.com/watch?v=DmGQ5zdcrB0).

Sí, ante los graves problemas de seguridad que tiene Zárate esta es la respuesta que propone el Departamento Ejecutivo y que contó con el aval unánime de todos los concejales, ya que se dividen en bloques por cuestiones administrativas, de cartel y cargos a ocupar, pero en las situaciones concretas en las que hay que sentar posiciones, debatir y ejercer el rol que la ciudadanía les otorgó, prefieren actuar de manera monolítica. Los límites entre oficialismo y oposición son tan permeables que el Concejo Deliberante zarateño bien podría ser un ejemplo de la sociedad líquida de la que hablaba Zygmunt Bauman.

Lo curioso es que para una tarea que según el gobierno local no es propia, propone destinarle $ 213.995.200,00, mucho dinero por cierto, o lo que es lo mismo $ 584.686,33 diarios.

Hasta el día de hoy deberían haberse utilizado $ 22.218.080,87, ¿en qué se utilizaron? porque si hay algo que no hay en Zárate (entre las múltiples cosas que no hay) es seguridad. Los concejales ejercerán su tarea específica de controlar las cuentas municipales como lo establecen las leyes o dan por bueno lo que les cuentan.

Y esto es algo que la ciudadanía debe saber. ¿Para qué se utiliza su dinero? No basta esperar más de un año para ver la Rendición de Cuentas Municipal, en las oportunidades que te lo muestran, es necesario saberlo día a día, máxime aun cuando del presupuesto original el Gobierno tiene previsto destinar el 16,4% del mismo ($ 35.080.200) a Administración, Control y Gestión de la Secretaría de Seguridad y el 83,6% que nadie conoce y que todos creen inútiles para modificar la realidad, más allá de asegurar la paga mensual.

Pero también debe saberlo porque el propio Gobierno no sabe lo que hace, y arrastra a la sociedad a pagar, en su conjunto, su ignorancia. Como veíamos propone un ‘programa de capacitación integral para ejecutar en el transcurso del año 2020’ pero el dinero dispuesto en el Presupuesto para ‘Capacitación, Formación y Gestión para la Prevención Social’ es cero. ¿Esto no lo vieron los concejales o hicieron la vista gorda? Por acción u omisión son cómplices. Y es preciso que la ciudadanía tome conocimiento de la situación. Las cosas no pasan porque sí, las cosas pasan por cuestiones como estas, porque quienes deben ser responsables son irresponsables.

Lo hemos visto cuando hablamos del Presupuesto destinado al básquet (https://principedelmanicomio.wordpress.com/2020/01/31/explicaciones-para-todos-y-todas/), también lo hicimos cuando hablamos sobre las políticas de Juventud (https://principedelmanicomio.wordpress.com/2020/02/03/manotazos-de-ahogado/), lo volvemos a ver al hablar de las cuestiones de seguridad. El Departamento Ejecutivo no sabe lo que envía y el Concejo Deliberante no sabe lo que vota. Nadie lee ni analiza nada, todo es copiar, pegar y cambiar los números de acuerdo a una pauta de aumento.

¿El intendente municipal leyó el Presupuesto que envió a consideración del Concejo Deliberante?

¿Los concejales leyeron el Presupuesto que les envió el Intendente y que ellos aprobaron?

Respondan honestamente a estas preguntas, las consecuencias de sus respuestas las paga el pueblo.