La ausencia de enzimas en los productos lácteos modernos existe por definición: la leche se pronuncia ‘pasteurizada’ sólo cuando todas las enzimas se han eliminado por calentamiento.
De la leche pasteurizada obtenemos mantequilla, helado, queso, yogur y chocolate con leche. El problema es que todos estos alimentos no se pueden digerir. La comida no digerida recorre todo el cuerpo y causa inflamación crónica de bajo grado. Y bloqueos. Es por eso que los nutricionistas holísticos generalmente están de acuerdo en que la leche es la causa principal de las alergias. No lo crees? Retire todos los lácteos durante 60 días de los alérgicos o un niño asmático.
Sí, sé lo que estás pensando: ¿de dónde obtendremos nuestro calcio entonces? Gran sorpresa: los lácteos no son una buena fuente de calcio porque la enzima fosfatasa, que es necesaria para absorber el calcio, fue destruida por la pasteurización. (Douglass) La única razón por la que pensamos que necesitamos lácteos para el calcio es porque la escuchamos toda la vida: en la televisión, en los programas de nutrición escolar, de los dietistas. Pero adivina quién pagó por toda esa publicidad y promoción.
Comenzando en la década de 1950, la Asociación Estadounidense de Productos Lácteos gastó millones proporcionando materiales “educativos” para las escuelas primarias estadounidenses en las que los productos lácteos se presentan como uno de los cuatro grupos de alimentos. Esto nunca tuvo nada que ver con la ciencia; esto es marketing. No hay tal cosa como los cuatro grupos de alimentos. ¡Lo inventaron! (McDougall) [Erasmus, E., Fats that Kill – 1993]
Entonces, en cuanto a los requerimientos de calcio de los niños:
“… La leche pasteurizada es incapaz de reconstruir o mantener huesos y dientes”.
– Royal Lee, 1955
Y en cuanto a la digestión:
“La leche y los alimentos infantiles modificados comercialmente son todos ajenos a la digestión hepática del bebé y pueden producir diarrea, alergias a la leche y estreñimiento”.
– H. Bieler, 1965 [Howell, Edward, MD – Enzyme Nutrition – Avery – 1988]
No sólo los africanos tienen intolerancia a la lactosa: todos los humanos tienen intolerancia a la lactosa cuando se trata de leche pasteurizada. Pero sigue siendo un juego de palabras: la lactosa es el azúcar de la leche. No somos alérgicos al azúcar de la leche; somos alérgicos a la leche Sin enzimas = comida chatarra.
La leche es una comida chatarra. ¿Crees que tu bebé lo necesita? Piensa otra vez. La leche de vaca pasteurizada está sensibilizando a su bebé a una proteína alergénica no alimentaria no natural. Considere esto: el hombre es el único animal que descubrió cómo eliminar las enzimas de la leche. (https://thedoctorwithin.com/pediatricians-brain-fats-and-raw-milk/)
La leche es un ejemplo muy común de un alimento artificial hecho por el hombre, sobre el cual un siglo de publicidad ha creado la ilusión de un alimento básico saludable.
Las mismas ideas se aplican a otros alimentos procesados. Eso significa uno que ha sido desvitalizado por la industria alimentaria al eliminar todas las enzimas. El problema es que, en primer lugar, solo las enzimas lo convirtieron en un complejo vivo.
Los comentarios anteriores se refieren sólo a la leche pasteurizada. La leche cruda de las vacas que viven en un ambiente rico en minerales naturales es otra historia en conjunto. El Dr. Price documenta a fondo la salud de los aldeanos alpinos suizos, aislados de los alimentos procesados. Algunas de estas personas sanas vivían de una dieta centrada en mantequilla cruda y queso crudo, de vacas y cabras. Su salud era mucho mejor que la mayoría de los nuestros hoy en día.
El punto es que los productos lácteos naturales, no procesados y no pasteurizados podrían ser un alimento básico superlativo, ya que están cargados con las vitaminas liposolubles A, D y E, minerales y enzimas.
Lo que destruye a la leche es la civilización: matar las enzimas por el calor, agregar antibióticos y hormonas a la dieta de las vacas, mantener a las vacas en un ambiente deficiente en minerales y prepararlas artificialmente durante largos períodos de almacenamiento.
FUENTE: www.ecoportal.net
